Se trata del tercer tumor más común, por detrás del cáncer de pulmón y de próstata en los hombres; y el segundo en el caso de las mujeres, después del cáncer de mama, siendo el más habitual del tubo digestivo. En España, se diagnostican 25.000 nuevos casos anuales, que representan el 10-15% de todos los tumores, y la segunda causa de muerte (13.000 casos anuales), detrás del cáncer de pulmón.

El riesgo aumenta con la edad, elevándose al 0.87% en individuos de 50 años de edad y al 5.8% en mayores de 80 años. Es el tipo más frecuente de cáncer entre las personas de más de 75 años, y es más común en los hombres que en las mujeres.

La mayoría de los cánceres colorrectales se localiza en el colon descendente, sigma y recto. Sin embargo, el aumento de su incidencia y el envejecimiento de la población se asocian a un desplazamiento proximal de las lesiones.

Factores de riesgo. La dieta y la herencia genética
El cáncer colorrectal (CCR) es el resultado de una combinación de factores ambientales y genéticos. Como factores ambientales nos referimos a la dieta rica en grasa, ingesta de alcohol, tabaquismo y vida sedentaria. Por otro lado, el aumento de la incidencia en los familiares de pacientes diagnosticados con esta enfermedad apunta a la participación de factores hereditarios.

El colon es un órgano expuesto de forma constante a sustancias ingeridas o producidas por su digestión, por lo que la dieta como un factor de riesgo clave.

  • Dietas de riesgo: dieta rica en grasas insaturadas, en carnes rojas, ingesta de alcohol y obesidad.
  • Dietas protectoras: rica en fibra, en pescado, en calcio y actividad física.

Actualmente sólo existe un estudio que muestre una asociación de aumento de riesgo en sujetos con una ingestión alta de grasa de origen animal. Hay mayor evidencia de la asociación entre la ingestión de carnes rojas y aumento de la incidencia de cáncer colorrectal, estimándose que un aumento diario de 100 gr de carnes rojas va asociado a un 12-17% de incremento de CCR. Esta población se caracteriza también por una ingestión menor de antioxidantes, hecho que se ha postulado como factor de riesgo.

El papel de la fibra en este tipo de cáncer es controvertido, y podemos encontrar estudios con resultados contrarios al respecto. Países con un índice alto de fibra en su dieta muestran un menor índice del cáncer en su población; sin embargo, los estudios en los que se ha intentado probar que la ingestión alta de fibra puede producir un efecto protector para el CCR han fracasado en demostrarlo.
Otros factores de riesgo asociados al cáncer colorrectal son:

– Historia familiar de pólipos adenomatosos o CCR
– Historia personal de pólipos adenomatosos o CCR
– Enfermedad inflamatoria intestinal
– Síndromes de CCR hereditario

El 15% de los CCR exhibe una relación familiar, y el 5% se asocia a un CCR hereditario.