Causas como el estreñimiento, la herencia genética, el sobreesfuerzo abdominal causado por el embarazo, malos hábitos alimentarios y la edad avanzada están detrás de las hemorroides, comúnmente denominadas almorranas. Se trata de la dilatación e inflamación de las estructuras venosas situadas en el canal anal.

Son comunes entre personas que tienen una edad comprendida entre 25 y 60 años, pero se suelen sufrir en silencio pese a ser tremendamente molestas y se tarda demasiado tiempo en consultar con el especialista. Desde este espacio te proponemos siete medidas eficaces para prevenirlas y atacarlas.

1. Consultar al médico en cuanto se sienten las primeras molestias. Buscar un diagnóstico exacto que determine el tratamiento adecuado. Sólo en estadios avanzados y con síntomas graves es necesaria la cirugía.

2. Evitar los sobreesfuerzos. Adoptar hábitos saludables en el cuarto de baño, como evitar reprimir el deseo de defecar o permanecer demasiado tiempo en el retrete.

3. La alimentación. La fibra es fundamental para un buen tránsito intestinal y en personas con hemorroides más aún. Gracias a la fibra combatimos el estreñimiento que causa un empeoramiento de las hemorroides, ya que la presión que se ejerce sobre éstas al expulsar las heces es mucho mayor. Con la fibra eliminamos mejor los residuos del intestino y de forma más fácil.

4. No comer picantes, grasas, especias y alimentos que producen gases, como las legumbres. Moderar el consumo de arroz, azúcares, caramelos y quesos curados, que endurecen las heces y dificultan su expulsión.

5. Beber líquidos en abundancia.

6. Luchar contra el sedentarismo. Hacer ejercicio físico regular, como caminar, correr o nadar.

7. Acolchar el asiento y descansar caminando. Si el trabajo obliga a estar mucho tiempo sentado, usar un pequeño cojín o almohada sobre la silla para aliviar la presión sobre la zona. Levantarse de la silla al menos cada dos horas y dar un ligero paseo.

8. Cuidar la higiene anal. Se debe evitar el rascado de las hemorroides y, tras ir al baño, ha de limpiarse la zona con agua tibia y un jabón neutro.